Ya seas abogado, albañil, bailarina o secretaria, en la mayoría de los empleos se necesita un amplio rango de movimientos en muchas partes del cuerpo para realizar algunas tareas. Una de las definiciones de "ser una persona flexible" es ser fácil de tratar, pero en este artículo abordaremos la otra definición de flexibilidad, la importancia de la flexibilidad física.
Es posible que no necesites ser tan ágil como lo eras cuando ibas al cole o al instituto, pero seguro que estás deseando poder girarte para ejecutar ese swing de golf o al menos ser capaz de agacharte de manera segura para atarte los cordones sin sufrir un tirón lumbar.
¿Qué es la flexibilidad?
Cuando tu cuerpo está operando con la máxima flexibilidad, tiene movimiento sin restricciones en sus extremidades y tronco. El grado de flexibilidad de tu cuerpo se ve afectado por los tejidos blandos ubicados en las articulaciones.
Los tejidos blandos que rodean las articulaciones incluyen músculos, ligamentos, tendones, cápsulas articulares y piel.
Los niveles saludables de flexibilidad se ven afectados por tu nivel de actividad, si has sufrido lesiones o no, y cuántas veces haces estiramientos de manera regular. Cuando tu rango de movimiento está restringido, es posible que no te des cuenta de los efectos negativos de vivir con una flexibilidad limitada.
La salud de tus cartílagos se ve comprometida cuando careces de un rango de movimiento adecuado, ya que se reduce la cantidad de líquido sinovial y el suministro de sangre que llega a tus articulaciones. Los músculos se fatigan cuando se restringe el movimiento, lo que hace que otros grupos musculares se compensen en exceso y se cansen. La falta de flexibilidad agrega estrés a las estructuras y tejidos en otras partes del cuerpo, como el dolor referido que se desarrolla en la rodilla debido a la tensión en la pantorrilla.
Beneficios del estiramiento
El objetivo principal de hacer estiramientos es aflojar los músculos, pero también mejorar la movilidad y reducir los factores que restringen la flexibilidad. A continuación te mostramos una lista con varios de los beneficios de mantener una rutina de estiramientos.
Mejora el rendimiento
Al estirar antes de participar en actividades físicas, puedes maximizar tu ejercicio mientras elevas tu nivel de coordinación.
Aumenta el suministro de sangre a los músculos
Para funcionar correctamente, los músculos y las articulaciones necesitan una buena circulación, que se mejora con el estiramiento.
Promueve una buena postura
Necesitas equilibrio para evitar el desarrollo de una postura encorvada o inclinada hacia la izquierda o hacia la derecha.
Ayuda a curar el dolor de espalda
Cuando los músculos están tensos, pierden el rango de movimiento. El estiramiento promueve la relajación muscular y reduce el dolor.
Alivia el estrés
Ya sea en su puesto de trabajo, en una clase de yoga o en casa, el estiramiento regular es una forma muy efectiva de relajarse y promover la calma, tanto para el cuerpo como para el cerebro.
Disminuye la frecuencia de los dolores de cabeza
Debido a que promueve la relajación, el estiramiento puede disminuir la prevalencia de los dolores de cabeza por tensión o estrés.
La mayoría de las técnicas de estiramiento son estáticas o dinámicas, y cada una sirve para diferentes propósitos. Los estiramientos dinámicos, o aquellos que involucran movimiento como las zancadas, son útiles antes de las actividades físicas para prepararte para el entrenamiento. Puedes reducir el riesgo de lesiones siguiendo un programa de acondicionamiento físico con estiramientos estáticos, que consisten en mantener cada posición durante entre 10 a 30 segundos.
Cómo aumentar tu flexibilidad
Tu bienestar general depende de muchos factores, y mantener el rango de movimiento de tus músculos es importante porque afecta a tu calidad de vida. Si tus músculos, ligamentos, tendones y huesos no funcionan correctamente, tus capacidades se verán afectadas y, por tanto, tu día a día se vuelve menos agradable.
Los ajustes quiroprácticos pueden ayudar a interceptar problemas de salud inminentes y mejorar su rango de movimiento.
A continuación te proporcionamos algunos consejos para maximizar tu flexibilidad:
Evita lesiones
Asegúrate de seguir las instrucciones cuando participes en deportes u otras actividades físicas que involucren la coordinación. Si sufres esguinces, distensiones, dolor o cualquier otro tipo de lesión, a menudo será el resultado de un movimiento restringido en alguna parte de tu cuerpo.
Desarrolla fuerza
Algunos expertos consideran que la fuerza es un complemento de la flexibilidad, porque tus músculos necesitan ambas capacidades. Tu rango de movimiento se puede ver limitado debido al bajo nivel de fuerza que tienes en ese grupo muscular.
Hidrátate y come bien
Debido a que tus músculos están compuestos en un 75% por agua, la hidratación mantiene los tejidos suaves y flexibles. Una dieta saludable a base de frutas y verduras naturales te proporcionará muchas de las vitaminas y nutrientes que tu cuerpo necesita para mantener la fuerza, la musculatura y la flexibilidad.
Usa rodillos de espuma
Las investigaciones promueven el uso de rodillos de espuma para mejorar la flexibilidad a corto plazo. De manera similar al estiramiento, aplicar el rodillo en las piernas aumentará la circulación en los músculos, lo que dará como resultado una mayor amplitud de movimiento. Otras herramientas miofasciales para relajar los tejidos incluyen pelotas de ejercicio, dispositivos de percusión y palos de masaje.
Cómo la atención quiropráctica puede mejorar la flexibilidad
Para una persona con un rango de movimiento limitado, el tratamiento generalmente incluye un examen de los grupos musculares grandes y pequeños en posiciones flexionadas y extendidas. También hay que tener en cuenta el historial completo de salud y los factores genéticos, además de los comentarios del propio paciente sobre las áreas en las que experimenta dolor o tiene una flexibilidad limitada.
Algunas de las áreas más importantes para evaluar el rango de movimiento son las lumbares, los isquiotibiales, la espalda, la columna vertebral, el cuello, las caderas y la pelvis.
A continuación te mostramos las diferentes formas de medición del rango de movimiento:
Rango de movimiento pasivo
El rango de movimiento pasivo es la capacidad de tu cuerpo para moverse cuando es manipulado por otra persona. Permanece relajado mientras tu quiropráctico verifica el movimiento dentro y alrededor de tus articulaciones.
Rango de movimiento de asistencia activa
Cuando una parte lesionada de tu cuerpo puede moverse por sí misma pero necesita ayuda, tu quiropráctico verificará tu amplitud de movimiento de asistencia activa, ayudando a tus articulaciones a moverse como no lo hacen por sí solas del todo. Estos ejercicios realizados por tu quiropráctico limitan el daño adicional en el área lesionada.
Rango de movimiento activo
Cuando una persona puede mover su cuerpo de forma independiente con el uso de sus propios músculos, se puede medir el rango de movimiento activo.
Tus articulaciones son un factor clave en el rango de amplitud de movimiento, y las terapias manuales, como los ajustes quiroprácticos, pueden estimular una mayor flexibilidad en el área objetivo. Un artículo publicado en Chiropractic & Manual Therapies cita un estudio que muestra una mejora en el rendimiento funcional cuando las personas con dolor lumbar crónico reciben intervenciones de terapia manual.
El cuidado quiropráctico regular facilita la detección de cambios en tu rango de movimiento. Cuando tu flexibilidad cae por debajo de su línea de base, tu quiropráctico puede obtener una lectura a tiempo de los problemas de salud que pueden estar surgiendo.
Puede que tu jefe esté más interesado en cuánto te esfuerzas por hacer tu trabajo, pero ser físicamente flexible y adaptarse al cambio también puede facilitarte la vida. Puedes mejorar tu flexibilidad y reducir el riesgo de lesiones manteniendo la salud de tus articulaciones a través del tratamiento quiropráctico. es muy probable que con nuestros consejos y un tratamiento quiropráctico adaptado a tus necesidades, objetivos y problemas puedas desarrollar y aumentar tu flexibilidad y, en general, mejorar tu calidad de vida. Con un poco de trabajo y esfuerzo conjunto con ayuda de tu quiropráctico te puedes convertir en la persona activa que siempre quisiste ser.
